Y esto va por mí, por lo que quedaba, por lo que dejaste cuando ni te hospedabas ni te ibas, por lo que jamás te dije, ni estuve a punto de decir, por todo aquello que perdiste la oportunidad de escuchar, por las locuras que te hubiesen encantado, y acabé guardando para mí y disfrutando a solas.
Esto va por el imparable punto y seguido, por la utopía del borrón y cuenta nueva, !por el portazo! que no fue visto, pero que dejó caer contra el suelo aquellos cuadros, tan valiosos para mí. Esto va por mis ventanas, con maravillosas vistas, siempre abiertas de par en par, desde las que jamás volverás a ver el Sol.
Aquí, mi piel y yo, hemos decidido dejarnos de deshacer ante el frío y la ignorancia.