Me cargué el abecedario, agoté todas las letras en poemas escondidos, ya no me quedan palabras ni frases descosidas que enhebrar, se quebraron los hilos, me tragué las agujas, y no hay ningún corcho que sostenga este papel en blanco que revolotea sin parar… Cómo escribir sobre lo que uno siente, si no puede describirse, si no puede transformarse, si no puede atravesar los poros ni el cerebro para darse forma, cómo desmenuzar el echar de menos, los recuerdos constantes, las sonrisas que se esbozan sin querer, los sueños golpeados por la realidad, cómo dejar huella en el otro escribiendo, si la interpretación es libre y el entendimiento único, cómo decir algo que no se puede decir, como sacar secretos a punta de navaja de nuestro propio pecho, como vaciarse sabiendo que no existirá el lleno, cómo dejar caer la pasión, llorar con calma o reir a carcajada sobre el papel, cómo hacer llegar un texto que jamás cabría dentro, cómo no afirmar que no sé escribir sobre lo que siento…