Si quieres te doy una pista, huele a música, está recubierto de especias, pero sabe dulce. Es cuestión de que lo saborees con tu lengua, sin reparo alguno, para saber realmente de lo que te estoy hablando. Crees que sabes lo que es, pero no tienes ni la más remota idea del todo si estás pensando en las partes, algunas experiencias sensoriales no se reducen a la suma, son el resultado de la reacción producida por el encuentro de dos o más elementos, que simplemente estallan, dejando de ser lo que eran individualmente, para crear algo en conjunto. Tampoco puedes prepararte para algo así, es inesperado y, lo quieras o no, sabes que puede ponerte del revés. Te aseguro de que después de haber dado tantos tumbos, querrás que esta sensación sea tu sitio, esté donde esté, a la hora que se presente, vaya seguida o no de un después. Puede caer, nos puede arrastrar, nos va a dejar sin palabras e inundados de ganas incontrolables de repetir.