He sentido tu piel,
Como el que se adentra en un cuerpo.
Nos hemos bebido las ganas y el tiempo, sin apenas darnos cuenta.
Confundimos el día y la noche sin separarnos, sin ni siquiera levantarnos de la cama.
Desayunamos lo que no se cocina y merendamos para seguir comiéndonos…
Mis ojos en ti, como si tú fueses parte de este cuerpo mío,
Tus ojos en mí, como si todo lo que mi cuerpo no ocupa se hubiese oscurecido.
Con el dar en primera línea,
Sin pensar en lo que estamos haciendo,
Con el más puro instinto en la mirada,
Con lo más profundo al descubierto,
Como la pasión, acabando de comerse al miedo…