Estallidos de dolor

Fuego y nieve
21 octubre, 2017
Tipos de hombres. Generalizaciones sin sentido y con humor
23 octubre, 2017
Show all

Estallidos de dolor

Como un taladro en mi cabeza, así es el dolor más desesperado que conozco. Estalla cuando le viene en gana, sin asociaciones posibles, sin avisos previos, entra por la puerta lanzando sobre mí, y sobre la mesa de mi vida, un impestuoso tornado. Empieza desordenándolo todo, lo pone del revés, y acaba colocándolo en otro sitio, del que después no hay manera de acordarse. Así no se puede pensar, así no se puede vivir, pero se vive, sería una utopía excusadora creer a pies juntillas lo que el dolor quiere. No es tan sencillo, el dolor siempre desata una lucha, una lucha entre distintas estancias, estén dentro de una, fuera o en ambas partes, no hay lección pasiva, ni práctica activa, es un proceso complejo que entraña la ardua tarea de equilibrar el amor y el odio. Odio el dolor por lo que me hace sentir y no hacer, pero lo amo por lo que me hace escribir y reflexionar. Ojalá no existiese, para no tener que presenciarlo, pero existe y va a existir siempre, es el mecanismo de supervivencia con más impulso de muerte que conozco, nos ayuda a mantenernos con vida, pero nos limita tratando de impedirnos que vivamos parte de ella, activando consciente y/o inconscientemente las ganas de autodestruirnos a nosotros mismos, para acabar con él.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *